Incendio del ONE Henry Hudson: qué aprendimos sobre riesgo logístico y la importancia del seguro de carga internacional

El pasado 21 de noviembre de 2025, el buque portacontenedores ONE Henry Hudson sufrió un incendio significativo mientras estaba amarrado en el Puerto de Los Ángeles. El evento paralizó operaciones en varias terminales, movilizó a fuerzas de emergencia y derivó en la declaración de Avería Gruesa, impactando a miles de importadores y exportadores. 

Más allá del incidente en sí, el caso expone cómo un solo siniestro puede comprometer toda la cadena logística global y dejar expuestas a las empresas que no cuentan con un Seguro de Transporte de Carga internacional adecuado. 

El fuego comenzó en una de las bodegas del buque, generando una densa columna de humo visible en gran parte del puerto. Las operaciones se detuvieron en cuatro terminales y se activó un comando de emergencia con participación de bomberos, Guardia Costera y equipos especializados en materiales peligrosos. 

Aunque el incendio fue contenido, la naviera declaró Avería Gruesa (General Average), un mecanismo legal del comercio marítimo que obliga a todos los cargadores a compartir los costos del salvamento, incluso si su carga no fue directamente afectada. Para liberar sus contenedores, los importadores debieron presentar garantías, un trámite que puede generar demoras y costos significativos si no se cuenta con un seguro de carga marítima con cobertura de Avería Gruesa. 

1. Interrupciones logísticas:
   Contenedores retenidos, demoras en aduanas y complicaciones en la cadena de suministros.
2. Costos imprevistos:
   Depósitos de garantía, almacenaje portuario, inspecciones, reestiba. Sin seguro, estos gastos salen directamente del bolsillo del cargador.
3. Riesgo reputacional:
   Empresas que operan con plazos ajustados para lanzamientos, promociones o entregas clave enfrentaron reprogramaciones y posibles penalidades.

• Mercancías peligrosas mal declaradas: como baterías de litio o sustancias químicas. 
• Fallas eléctricas o mecánicas: cortocircuitos, equipos reefer defectuosos. 
• Estiba incorrecta: cuando la carga peligrosa no se posiciona siguiendo las directrices del Código IMDG (International Maritime Dangerous Goods Code), se incrementa el riesgo de reacciones químicas, incendios o propagación descontrolada de un siniestro dentro del buque. 
• Factores humanos: errores en inspección, documentación o manipulación. 

• Declaración precisa y verificación de mercancías peligrosas. 
• Mantenimiento preventivo y monitoreo estructural. 
• Sistemas de detección temprana de incendios en bodegas. 
• Capacitación del personal en riesgos específicos como cargas IMDG. 
• Estrategias logísticas diversificadas, evitando la dependencia de un solo puerto. 

• Sin seguro, incluso una carga sin daños puede generar costos inesperados. 
• Depender de una sola ruta o puerto es una vulnerabilidad operativa. 
• La correcta declaración de mercancías peligrosas es crítica. 
• La gestión de riesgos no es un gasto: es continuidad operativa. 
• Una póliza integral evita pérdidas financieras y de reputación. 

El caso del ONE Henry Hudson refuerza un principio clave del comercio internacional: ningún embarque está 100% libre de riesgos. En Hanseatica, diseñamos Seguros de Transporte de Carga personalizados, adaptados a cada tipo de operación, ruta y mercancía. Protegemos mucho más que tus bienes: protegemos tu capacidad de cumplir, crecer y sostener tu operación. 

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