5 claves para proteger tus obras de construcción y montaje en un sector que vuelve a crecer

El 2025 marcó un punto de inflexión para la construcción privada en Argentina. Después de años de volatilidad y pausa en grandes inversiones, el sector empezó a mostrar un crecimiento moderado, impulsado por proyectos residenciales, comerciales, industriales y de infraestructura energética. 

Según reportes del mercado, la construcción argentina podría crecer entre un 4 % y un 9 % hacia fines de 2025, dinamizada principalmente por el impulso del sector privado y la reactivación de desarrollos que habían quedado suspendidos. 

Pero la verdadera oportunidad aparece mirando hacia adelante:  El mercado se valoró en alrededor de USD 1.12 billón en 2025, y se proyecta un crecimiento sostenido a partir de 2026 con una tasa anual compuesta superior al 3%, tendencia que podría alcanzar un promedio de 4.9 % anual entre 2026 y 2029, especialmente en segmentos como residencial, industrial y energías renovables. 

En este escenario de expansión, donde crece la demanda, la complejidad técnica y el ritmo de obra, también crecen los riesgos operativos. Y es justamente ahí donde el Seguro Técnico de Construcción y Montaje de Hanseatica se convierte en un aliado estratégico para asegurar continuidad, eficiencia y protección financiera. 

A continuación, te presentamos 5 claves para entender por qué los Seguros Técnico de Construcción y Montaje, y el Seguro de Responsabilidad Civil para Excavaciones, Construcción, Instalaciones y Montaje son fundamentales en este contexto.

Durante los trabajos de construcción o montaje, pueden ocurrir daños accidentales que no estaban contemplados: golpes, caídas de materiales, errores operativos, fallas en estructuras temporales, entre otros. 

Hanseatica cubre todo riesgo de pérdidas o daños materiales por cualquier causa accidental no excluida, permitiendo que la obra continúe sin interrupciones inesperadas. 

Cambios de clima extremos, tempestades o incluso movimientos sísmicos representan un riesgo para estructuras, instalaciones y equipos. 

La cobertura incluye daños de la naturaleza, incluyendo terremotos, para proteger los bienes asegurados frente a eventos que están fuera del control humano. 

Durante operaciones de montaje, excavación, izaje, manipulación de materiales o durante la ejecución de la cláusula de mantenimiento, pueden producirse daños al propio proyecto. 

La póliza cubre daños causados por el contratista durante estas operaciones. 

Muchos siniestros se producen justamente cuando el proyecto está cerca de finalizar: durante pruebas, calibraciones o primeras operaciones. 

Hanseatica cubre los daños materiales que sufran los bienes asegurados durante la etapa de pruebas y puesta en marcha. 

Además del Seguro Técnico de Construcción y Montaje, las empresas del sector pueden fortalecer aún más su protección incorporando el Seguro de Responsabilidad Civil específico para actividades de obra, que cubre los daños a terceros derivados directamente de las tareas de construcción, refacción, excavación e instalación. Este seguro es especialmente relevante porque las obras se desarrollan en entornos cada vez más complejos, muchas veces rodeadas de propiedades lindantes, infraestructura sensible o espacios de tránsito frecuente. Cualquier incidente puede generar impactos legales, económicos y operativos significativos. 

Dicha cobertura ofrece protección ante daños causados por: 

✔ Derrumbe del edificio en construcción o refacción
✔ Caída de objetos
✔ Incendio y/o explosión
✔ Cables y descargas eléctricas
✔ Carga y descarga de materiales
✔ Abertura de zanjas
✔ Prueba de instalaciones destinadas a producir, transportar o utilizar vapor y/o agua caliente
✔ Derrumbe parcial o total de edificios linderos
✔ Filtraciones, rajaduras, desprendimientos de revoque, rotura o taponamiento de desagües y cañerías 

Esta cobertura complementaria ayuda a las empresas constructoras, desarrolladores y contratistas a gestionar uno de los riesgos más sensibles del rubro: el impacto a terceros, ya sea en bienes linderos, personas o infraestructura ajena. 

El Seguro Técnico protege el avance físico y operativo del proyecto (daños materiales, naturaleza, contratistas, pruebas y puesta en marcha), mientras que la Responsabilidad Civil para construcción: 

• cubre las consecuencias hacia terceros, 
• ampara daños colaterales propios de las tareas de obra, 
• respalda legal y financieramente al constructor ante reclamos, 
• proporciona una línea de defensa ante riesgos que exceden la obra misma. 

La combinación de ambos seguros permite a empresas y contratistas operar con un nivel de respaldo mucho más sólido en cada etapa del proyecto.

Cada obra es una inversión estratégica y cada etapa implica riesgos que pueden gestionarse de manera inteligente. 
 
¿Estás listo para asegurar la continuidad, seguridad y eficiencia de tu proyecto de construcción o montaje? Agenda una cita con nuestro equipo y descubramos juntos la cobertura ideal para tu negocio. Estamos para acompañarte en cada paso.